Naturaleza Vibra
 

Podríamos partir de la propuesta de ejercitar nuestro entendimiento pero nosotros no entendemos
dado que nuestra Naturaleza nos lo impide, nosotros sólo vivimos.
 

Contemplar una columna y ser todo aquello que quieres, todo aquello que está por delante de tus
pies. Atender a la estructura de la Naturaleza, una Naturaleza en clave mayúscula siendo esta la
estructura que des-estructura. En-tramado de realidades intermitentes, inconsecuentes y
constitutivas. No se nos presenta más que aquello que nos golpea de lleno en los labios y desde
entonces, entonces se puede entonar esta canción.

El ritmo lo marca lo que brota y lo que brota lo puede remarcar aquel impacto que puede resurgir y volver a ser siempre que quiera desde el momento en el que el trazo implosione de forma explosiva incluyendo aquello que radicalmente se constituye por su propia morpho-logía sinestésica.
 

Si tuviéramos que elegir ser o no ser desde un punto de vista en concreto , yo elegiría no ser , para luego poder desde algún momento, sacar la cabeza. Como el agua de las fuentes siempre la presión se advierte en el movimiento , el contraste de todo aquello que por sí parece firme y fuerte no es otro que el resultado de lo que se alberga en un lecho irreductible de lo que nosotros podríamos esperar. Querré color y querré vida, querré forma y querré autonomía. Aquello que tendrá que ver con la mancha y con la marcha constante y latente aquello que sea el impasse , el resultado que se contrapone desde los trazos acuciantes y puntiagudos. El respiro de la forma.

Ese será el trabajo propuesto por Eduardo Alonso. Todo lo que rebuscar en un saco que contenga y resista sin tratar de buscar en el punto en donde todo lo que pueda resultar de vaya a ser tal y como debería. Atender a aquello que entre lo blanco, los trazos degradados y el resquicio que permiten las sombras nos muestra la luz, justo desde ese instante en el que la mancha emborronada de tinta tras empañar la vista nos permite esbozar, dibujar, y otear en nuestro instante aquello que podemos considerar como percepción, color que responde a la identidad de activos en movimiento que no deja de ser en ninguna manera el resultado del compendio infográfico de la vida misma, lo natural traído de la mano de aquello que supone el tacto por el respeto.
 

La madurez que supone la activación de ciclos que brillan en su propia condición per se es donde
nos lleva Paco sanguino. Tratando de alcanzar y acceder a aquello que podríamos considerar el
punto intermedio entre la verdad y la mentira, pero será todo color, será todo verdad. También así la imagen de aquello que despierta como llama vivaz y fogosa, como llanto y pesadumbre,
suponiendo el relevo de la pesadumbre que será lo que precede siempre a lo real, que de acuerdo a la forma es tal y como se está, así es como el trabajo de Sofía Santaclara nos lleva a las direcciones de contenido que nos permite prolongar aquello que nosotros podemos trazar en lo que aprehendemos. Y si lo entendemos.

Y en este viaje ocurrirá que el brotar entendiendo nuestro proceder mismo, lo que acontece de forma distinta a lo que habría dicho que comprendiera allí está la tela estéticamente consciente, la tela que se revierte e invierte convirtiendo su textura en planos de color y sensación, ahí queda el trabajo de Carol Solar un trabajo que traslada las intenciones y pretensiones de lo misterioso y lo natural desde la desfiguración popular. Y no queda otra. Y si quedase otra, será el salto, será aquello que vamos a llamar sutil y desde lo sutil y lo sincero surge lo vivo y lo esporádico, surge el impacto más directo e intrincado con la radicalidad. Y en lo esporádico aparece la performance y la performance nos lleva a aquel trazo que sencillamente viene sin más. Sin más, y justo por eso, ni más ni menos, nos plantea Omar Jerez acompañado siempre de la artista visual Julia Martínez, un rito, aquello que no deja de ser la explosión vital, un cálido abrazo para una bienvenida.
 

Una entrada que como buena puesta de largo pretende en todo momento ser el paso que precede a la continuación de nuestra posteridad.

Una entrada a un entreacto que nos hará sentirnos, nos hará vibrar. Naturaleza vibra.

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Enrique Yáñez. Comisario del proyecto.